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El yoga es una disciplina, una filosofía de vida, una forma de ser y de vivir que presta toda la atención a su propio ser.

¿Conoces los beneficios del yoga facial?

Son ejercicios que se centran en el rostro, una actividad que incrementará la resilencia interna de la piel para frenar los signos del envejecimiento.

Hoy en día está muy extendida la creencia de que existe una gran vinculación entre el cuerpo y la mente, y el rostro es una de las partes del organismo en la que se pueden somatizar los efectos de nuestros estados de ánimo, por ejemplo, cuando estás estresada o cuando estás feliz tus rasgos faciales se tensan o se relajan.

El yoga facial incrementa el cuidado del rostro por medio de la realización de ejercicios localizados en esta parte del cuerpo.

Tu expresividad por sí misma es dinámica ya que a lo largo del día gesticulas de forma natural.

El estrés no solo produce malestar en las distintas partes del cuerpo, sino también en tu rostro. Así como practicas deporte destinado a ponerte en forma y sumar bienestar físisco y emocional, también puedes practicar gimnasia facial con este tipo de yoga.

Es una disciplina que te ayudará a tonificar la piel, sumando luminosidad por medio de una metodología con unas rutinas totalmente naturales.

A lo largo del día vamos sumando tensiones que generan un cansancio físico, un cansancio que aparece casi siempre reflejado en el rostro. Por eso es tan aconsejable llevar a cabo una rutina facial. Además puede ser perfecta para que a lo largo del día encuentres unos minutos para ti.

El rostro es una zona del cuerpo que contiene multitud de músculos diferentes, por esta razón también necesita un ejercicio específico.

El yoga facial propicia la oxigenación de la piel a través de dinámicas específicas para tonificar las distintas zonas localizadas de la cara.

La nutricosmética es la ciencia que investiga, desarrolla y comercializa productos alimenticios con micronutrientes. Su principal objetivo es mejorar el estado de la piel, el cabello y las uñas.

¿Cómo actúa?

Mediante la nutricosmética se ingieren complejos nutricionales que mejoran la dieta. Actúan desde el interior de nuestro cuerpo y pueden complementarse con tratamientos dérmicos para así reforzas su efecto.

Estos complejos nutricionales se encuentran en los extractos de las plantas, sus aceites y semillas. Al ingerirlos, ejercen sus acciones beneiciosas directamente desde el interior. El objetivo de la nutricosmética es llegar a las capas internas de la piel para así regenerar la epidermis.

En las capas interiores de la piel no puede actuarse mediante cremas, por eso es tan importante el uso de nutricosmética. Se utiliza para reducir las arrugas, la grasa, la celulitis, para reducir el acné y conseguir una piel más limpia.

Los micronutrientes que luchan contra el envejecimiento y son fáciles de encontrar en los alimentos son:

• El licopeno (que se encuentra en los tomates)
• Los polifenoles (en el té verde y granadas)
• El resveratrol (en el vino tinto, uvas y cacahuetes)
• Los flavonoides del cacao

Dentro de los productos de nutricosmética anti-edad encontramos:

• El  ácido hialurónico, CoQ 10,
• El colágeno
• Las vitaminas A, C y E

Todos estos productos mejoran el estado de las células de la piel y potencian la producción de colágeno para evitar el daño ambiental, que a su vez provoca la aparición de las arrugas.

• Para la piel seca o irritada: El Omega-3 y probióticos pueden ayudar a calmarla desde el interior.
• Para el pelo y uñas:el colágeno y la sílice fortalecen ambos.

• Para el pelo y uñas:el colágeno y la sílice fortalecen ambos.

Los macronutrientes son los nutrientes que aportan la mayor parte de energía a nuestro organismo y se divide en tres grandes grupos.

Hidratos de carbono, lípidos y proteínas.

Los hidratos de carbono: 

Estos son la principal fuente de energía, es el primer combustible para el músculo cuando se realiza deporte y estos se dividen en 2:

1. Simples: se digieren rápidamente.
2. Complejos: su absorción es más lenta y son combustibles de larga duración.

Proteínas: 

Las proteínas son compuestos orgánicos complejos y son el principal componente estructural de las células y los tejidos.

Estas se introducen en los músculos, donde se transforman.

Si existe un déficit de proteína, el organismo utiliza las que se tienen almacenadas haciendo así que los músculos disminuyan.

Lípidos:

Son la fuente principal de energía de los alimentos, compuestos orgánicos de carbono, hidrógeno y oxígeno.

División de los lípidos, según sus funciones:

Función de reserva: constituyen la principal reserva energética del organismo.

Función estructural: forman las bicapas lípidicas de las membranas, recubren los órganos y les dan consistencia.

Función transportadora: que va desde el intestino hasta su lugar de destino.

Un macronutriente es un tipo de nutriente que aporta gran cantidad de energía al organismo de los seres vivos. Dentro de esta familia de macronutrientes se puede hacer una clasificación entre:

Macronutrientes orgánicos. Dentro de este grupo se pueden encontrar glúcidos, proteínas y también vitaminas (que pertenecen a los micronutrientes)
Macronutrientes inorgánicos. Son los minerales como el agua y el oxígeno.
La diferencia principal entre unos y otros es que los macronutrientes son los responsables de producir energía, mientras que los micronutrientes sólo aportan pequeñas cantidades de nutrientes para mantener la salud del organismo.

Oligoelementos. Minerales.

Es importante mencionar que se puede considerar un macronutriente a un tipo de sustancia para un tipo de organismo vivo pero que esa misma sustancia puede ser considerada como un micronutriente en otro tipo de seres vivos. Esto quiere decir que un mismo nutriente puede ser imprescindible para un tipo de organismo (convirtiéndose así en un macronutriente para él) pero a la vez perjudicial para otro ser vivo (transformándolo en un micronutriente).

Es muy común  cometer errores en la dieta y lo hacemos muy a menudo, y esto se debe a la desinformación que tenemos sobre este campo.

Y este error es el de creer que tomar zumos de fruta nos aporta la misma carga nutricional que las piezas frescas, pero la realidad según los expertos es que según como la comamos no van a provocar las mismas reacciones a nuestro organismo.

Los zumos tienen más calorías de las que nosotros creemos :

Últimamente esta muy de moda llevar un estilo de vida saludable y se han puesto muy de moda los soothies o zumos de frutas.

Todas las celebrities y todas las revistas los recomiendan, sin embargo hemos conocido estudios que indican que no son tan saludables como dicen ser.

La OMS relaciona el consumo de zumos de frutas con la obesidad. Los estudios y especialistas afirman que al beber un vaso de zumo de naranja, te estas tomando de un trago, el azúcar de tres naranjas, estos azúcares se absorben muy rápido y provocan una respuesta metabólica muy diferente a la de cuando te tomas una naranja entera. Además al no tener fibra, no te deja sensación de saciedad, nunca te comerías 3 naranjas enteras de una sentada.

Al exprimir la naranja, gran parte de ella se queda en el exprimidor perdiendo la pulpa donde están los verdaderos nutrientes. De esta forma podemos decir que lo que consumimos realmente son los azúcares que se encuentran en estos alimentos. Y no entramos a hablar sobre los zumos que se comercializan donde casi todos sus ingredientes son artificiales.

Además con estos zumos podríamos decir que con el consumo de zumos, excedemos la cantidad de fruta recomendada para un día, obteniendo así demasiada glucosa, y exceso de vitaminas, que puede dar lugar a consecuencias negativas para el organismo como hipervitaminosis.

No queremos decir que los zumos naturales sean dañinos y perjudiciales pero si que sean tomados con moderación y de forma ocasional.

Como ya sabemos el seguir una alimentación saludable es imprescindible par tener una buena salud, no obstante es de gran importancia educarnos y prepararnos para vivir de la manera más natural posible, para evitar la sobre carga de toxinas en órganos vitales como puede ser el hígado y los riñones.

Uno de los mejores remedios, son las plantas medicinales, que usadas de una forma adecuada suponen una herramienta eficaz para promover la salud y el bienestar.

Tenemos que saber que aunque se trate de plantas totalmente naturales deben siempre respetarse las cantidades y formas recomendadas de uso ya que no están extensas de tener efectos secundarios.

Una de las mejores formas de consumirse, es en infusión y uno de los mejores momentos es tras la comida ya que nos aportará múltiples beneficios entre los que podemos destacar la saciedad del apetito y una mejor digestión.

Si después de comer, nos quedamos con sensación de hambre y queremos ver saciado nuestro apetito, bastará con tomar una infusión bien caliente, podemos hacerlo después de tomar una fruta, o bien sustituirla.

Las infusiones tras la comida permiten mejorar la digestión, haciéndola más rápida y más fácil de sobrellevar.

En este caso una infusión, será muy beneficiosa para aquellas personas que tengan algún tipo de problema gástrico o intestinal, ya que van a poder prevenir los trastornos que pudieran aparecer durante el proceso de la digestión.

Las infusiones más recomendadas de tomar después de las comidas son:

• Hierba luisa
• Boldo
• Hinojo
• Manzanilla

El uso después de las comidas de estas infusiones no quiere decir que sirvan también a la hora de hablar de los tés, un té no se recomienda tomar justo después de comer ya que aveces interfiere y no deja absorber algunos de los nutrientes como  las proteínas, minerales y vitaminas.

El té es mejor tomarlo a media un ratito después de haber merendado 🙂